Deja ir los pensamientos pasados y futuros

¿Sabías que aferrarte a tus pensamientos pasados y futuros puede impedirte disfrutar realmente del presente? Aprender requiere ser consciente de lo que hay aquí y ahora. Para aprender de un modo en el que el español pueda realmente fijarse, necesitas aprende a despejar tu mente y deja de preocuparte por lo que no puedes controlar.

Pensamientos pasados

Son ansiedades y fijaciones de lo que ya has hecho en el pasado. Las obsesiones con el pasado, tanto positivas como negativas, pueden empezar a afectar a tu presente. Pensar demasiado en formas en que has fracasado, conceptos que te resultaron difíciles o formas en que te has avergonzado a ti mismo. hablar con hablantes nativos no te ayudará a mejorar.

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Por otra parte, Centrarte demasiado en la grandeza también puede hacerte vacilar a la hora de probar cosas nuevas. Sentirte demasiado cómodo con tus habilidades puede hacerte ansioso por probar cosas nuevas y fracasar, o hacerte sentir complaciente.

Pensamientos futuros

Quizá pienses: "¿Cómo pueden afectarme los pensamientos futuros si ni siquiera los he pensado todavía?". Esto se refiere a las ansiedades sobre el futuro. Pensar demasiado en lo que posiblemente ocurra puede distraerte de tus verdaderos objetivos. Preocuparte demasiado puede hacer que te sientas agotado, y ponerte demasiado nervioso para probar cosas nuevas.

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¡Probar cosas nuevas puede ser emocionante! Aprender un idioma te abrirá muchas puertas de oportunidades, y es estupendo soñar con lo que harás en el futuro. Sin embargo, si sientes que no progresas en el horario que te has fijado, puedes sentirte agotado y frustrado.

Permanece en el presente

En realidad, puede requerir mucha práctica liberarse de los pensamientos pasados y futuros y permanecer realmente en el presente. Permanecer en el presente tiene muchos beneficios para la salud y el bienestar, y una de las mejores formas de practicarlo es meditar. La meditación es diferente para cada persona, y hay muchas maneras de principiantes para iniciarse en las prácticas de mindfulness. Podrías centrarte en tu respiración, prestar atención a los 5 sentidos o dar un paseo escuchando los sonidos de la naturaleza.